Con solo leer algunos titulares, podemos sentirnos entusiasmados por las aplicaciones de 5G que se anuncian: vehículos autónomos, fábricas inteligentes, juegos de realidad aumentada (RA) y realidad virtual (RV), y mucho más. Pero cuando se trata de las tecnologías que hacen posibles esas novedades, los medios parecen centrarse en las radios 5G. Aunque las nuevas radios serán esenciales para generar tasas de datos más altas, si nos centramos demasiado en ellas, pasaremos por alto otros factores fundamentales.
Los cambios que trae el 5G son mucho más profundos y obligan a los proveedores de servicios a repensar la forma en que diseñan y operan sus redes. Pero esta realidad tiene lugar «entre bastidores» y no siempre encuentra lugar en los medios de comunicación. Sin embargo, son esos cambios (la migración a infraestructuras basadas en la nube, la redefinición del borde de la red, la reinvención de las oficinas centrales, la automatización de la segmentación de redes y la integración total de la seguridad) los que generan casos de uso novedosos y verdaderamente revolucionarios con el 5G. En otras palabras, no es solo el 5G, sino la era de la nube, el 5G y la IA lo que transformará los negocios de los proveedores de servicios.
¿Qué es tan especial acerca de la era de la nube, el 5G y la IA? ¿Por qué representa un cambio tan significativo para los operadores de red? ¿Y cómo enfrentarán estos últimos la complejidad operativa que suponen estos cambios? Recientemente, Amit Bhardwaj, de Juniper, abordó estas cuestiones en el podcast de Packet Pushers «Heavy Networking 493: Taming Service Provider Complexity in 5G Networks».
La economía impulsa el futuro de las redes 5G
Los proveedores de servicios globales ya están adoptando el 5G. Sin embargo, tal como lo explica Amit, aún no han encontrado la aplicación que pondrá de manifiesto el verdadero valor de esta tecnología.. A medida que los operadores actualizan sus redes, se preguntan si esas inversiones garantizarán algún tipo de retorno.
Pero las nuevas radios 5G no podrán brindarles una respuesta por sí solas. Sí, su capacidad es mucho mayor que la del 4G. ¿Pero con qué frecuencia monetizan el ancho de banda los proveedores de servicios? En la práctica, el aumento de la velocidad de la red enseguida pasa a ser lo mínimo que cabe esperar y los ingresos promedio por usuario (ARPU) permanecen inalterados.
Sin embargo, la migración a las redes preparadas para la nube, el 5G y la IA está a punto de cambiar ese esquema por completo.
Todo empieza con la red
El verdadero potencial transformador del 5G yace en el plano económico, tanto en términos de ganancias como de ventas. El aumento de las ventas se basa en los nuevos servicios y casos de uso, que generan otros modelos y experiencias empresariales, y hasta industrias completamente nuevas. Entre los ejemplos, se encuentran las aplicaciones con latencia ultrabaja, las comunicaciones altamente confiables para la toma de decisiones automatizada, un paquete completo de servicios empresariales prestados y administrados en la nube, la conectividad segura para miles de millones de dispositivos del Internet de las cosas (IoT) y el acceso híbrido convergente.
Ninguno de esos ejemplos depende de un mayor ancho de banda. En su lugar, necesitan una red que tenga la flexibilidad y la latencia ultrabaja de una nube distribuida, una infraestructura multiservicio habilitada por la segmentación de red automatizada y un modelo económico a escala de red, lo cual solo es posible con la migración a la nube y la IA.
La era de la nube, el 5G y la IA también tiene consecuencias para las ganancias, no solo porque aumenta la velocidad de la red, sino porque además los recursos cercanos a los usuarios se arman y se desarman de forma dinámica bajo demanda y cuando y donde se los necesita.
Los proveedores de servicios son los únicos actores de la cadena de valor que pueden combinar estas capacidades. Pero, para ello, necesitan un tipo de red muy distinto. Necesitan una red que cuente con lo siguiente:
- Un borde completamente nuevo: Ciertos casos de uso, como las fábricas inteligentes, los juegos móviles con RA y las comunicaciones entre vehículos, no funcionarán con modelos tradicionales en los que los puntos de conexión se comuniquen con una nube centralizada. Por el contrario, necesitan recursos que se encuentren cerca del lugar en que se consumen y que tengan una latencia de ida y vuelta que se pueda medir en nanosegundos. Para alcanzar este objetivo, los proveedores de servicios están transformando los puntos de presencia (PoP) tradicionales en modernas oficinas centrales dentro de una nube distribuida. Así, el concepto básico de «borde» se vuelve flexible. ¿El borde de la red reside en un PoP? ¿Una red metropolitana? ¿Un dispositivo CPE? Según el caso de uso y la necesidad del cliente, la respuesta será sí, sí y sí.
- Segmentación de red: Durante años, los proveedores han tenido una capacidad de red limitada para ajustar los servicios a las necesidades específicas de los clientes empresariales. El 5G cambia por completo ese modelo, ya que permite que los proveedores de servicios dividan la red en segmentos personalizados que se adapten a casos de uso específicos. Los segmentos de red combinan un ancho de banda, una latencia y una ubicación de cómputo específicos en virtud de un acuerdo de nivel de servicio. Asimismo, incorporan nuevos requisitos para garantizar un control detallado del tráfico y una segmentación integral, desde las redes principales hasta el borde.
- Seguridad integral: Los analistas prevén que, para 2021, la ciberdelincuencia tendrá un costo de 6 billones de dólares. Con el 5G y el IoT, aparecen nuevas superficies de ataque, y las amenazas crecen en términos de volumen, frecuencia y sofisticación. Los clientes ya no pueden depender de respuestas manuales y sistemas de seguridad inconexos para protegerse en tiempo real y a gran escala. Si no adoptan un enfoque integral y conectado para la seguridad, simplemente no pueden brindar nuevos servicios y experiencias.
- Automatización: Todos estos cambios complican las redes de los proveedores de servicios y, como resultado, los modelos operativos tradicionales colapsan rápidamente. Hay demasiadas tareas y decisiones que no pueden esperar la respuesta de los operadores humanos. En su lugar, los proveedores de servicios necesitan las redes autónomas Self-Driving Networks™, que utilizan la inteligencia artificial para reaccionar a los cambios con dinamismo. El proceso es largo, pero empieza con una capa de red que esté completamente automatizada, o que al menos sea automatizable. La automatización de lazo cerrado y la toma de decisiones basada en eventos dependen de que todos los nodos admitan la telemetría y la programabilidad.
- Infraestructura basada en la nube: La transición a la nube es un requisito necesario para obtener una red 5G que pueda adaptarse con la rentabilidad adecuada, tener la agilidad suficiente para responder a la próxima aplicación que pondrá de manifiesto el verdadero valor de esta tecnología y permitir que los proveedores de servicios gocen de los mismos beneficios con los que han generado valor los proveedores de escala web. Comienza con la virtualización y la desagregación, y avanza hacia conceptos más sofisticados, como los contenedores y los microservicios. Pero, lo que es aún más importante, la infraestructura basada en la nube es clave para aumentar el nivel de ventas no solo con nuevos servicios, sino también con un tipo de modelo empresarial «como servicio».
Juniper impulsa la transformación de la era de la nube, el 5G y la IA
Una vez que comprenda los enormes cambios que se producen en las redes de los proveedores de servicios, no podrá entender por qué solo se hace hincapié en las nuevas radios 5G. ¿Qué hay de todo el resto?
Allí es donde interviene Juniper. El esfuerzo que supone la adopción del 5G para los proveedores de servicios no nos desalienta. Por el contrario, ofrecemos una nueva generación de soluciones de red que permiten alcanzar el éxito en la era de la nube, el 5G y la IA. Escuche el podcast completo para conocer el análisis que hace Amit de esas innovaciones, incluidas las siguientes:
- Nuevos modelos de borde y separación del plano de control y del plano de usuario
- Compatibilidad con la precisión de tiempo «clase C» para permitir casos de uso de baja latencia
- Protección lineal contra los ataques de denegación de servicio distribuidos (DDoS) a gran escala
- Nuevos marcos de gestión para alcanzar una telemetría y una programabilidad extendidas
- Herramientas de automatización, como Contrail Healthbot, que dan lugar a una toma de decisiones automatizada y basada en eventos
Estos tipos de innovaciones no siempre se publican en los medios; pero hable con los proveedores de servicios y verá que allí es donde comienza la verdadera revolución.